Evangelio lunes 14 de octubre

Lunes 14 de octubre de 2019 | Magdalena Fernández

14 de OCTUBRE de 2019

Evangelio según San Lucas, capítulo 11, 29 - 32

Lunes de la Vigésima Octava Semana del Tiempo Ordinaria

Al ver Jesús que la multitud se apretujaba, comenzó a decir: "Esta es una generación malvada. Pide un signo y no le será dado otro que el de Jonás. Así como Jonás fue un signo para los ninivitas, también el Hijo del hombre lo será para esta generación. El día del Juicio, la Reina del Sur se levantará contra los hombres de esta generación y los condenará, porque ella vino de los confines de la tierra para escuchar la sabiduría de Salomón y aquí hay alguien que es más que Salomón. El día del Juicio, los hombres de Nínive se levantarán contra esta generación y la condenarán, porque ellos se convirtieron por la predicación de Jonás y aquí hay alguien que es más que Jonás.

Meditación de Magdalena Fernández Pérez

"Pide un signo y no le será dado otro que el de Jonás"

Dios Padre me dice: la fe no debiera basarse en signos. Proviene del reconocimiento y apertura a mi Amor. Sólo así podrás cimentar tu casa sobre roca. Si crees sólo por lo que te ha sido dado, por lo que has visto o por quienes has conocido, al menor movimiento te atacarán las dudas. En cambio, si crees porque sabes que has sido –y que siempre serás –mi hija muy querida, no hay mal ni pérdida en este mundo que pueda alejarte de mi Amor infinito.

A más de algún amigo le he oído decir que perdió la fe cuando empezó a fijarse en los pecados de la Iglesia, tanto de sus ministros como de sus fieles. Y mi misma fe tambalea cuando rezo persistentemente por algo, y pareciera ser que no estoy siendo escuchada. Pues esta "fe" es superflua y vacía, ya que está poniendo en el eje acciones y eventos humanos. El humano cambia, se equivoca, se confunde. Dios es estable. Si quiero que mi fe sea real e imperecedera, debe venir de aquel que siempre está ahí, que ama sin condición.

Señor, enséñame a fundamentar mi fe en tu Amor y no en las cosas que van pasando en este mundo. Que el movimiento de mi amor vaya desde ti hacia otras personas y cosas, y no al revés. Que mi corazón se encuentre siempre en Ti, Dios Padre Todopoderoso. Y que así, sin importar si me encuentro en compañía o soledad, abundancia o pobreza, pueda cantar alabanzas en tu Nombre. Enséñame a ser fiel, y a confiar en tus designios. Dame también la valentía para hablar de tu Amor cuando tu Iglesia esté siendo atacada.

AMÉN

Comentarios
Nombre:   Procedencia:
Comentario:
Código de seguridad:   captcha
Caracteres restantes: 1000